Estar sin Alisson estos días a sido simplemente horrible, sin sus llamadas a media noche, sus ataques de besos, su obsesión por llevarme a comprar maquillaje. La extraño.
Pero era mi culpa, yo la termine, yo la hice llorar. Joder.
Pero tenia que hacerlo, si Dylan se enteraba o se entera que estuve con su hermana es capas de decirle cosas muy hirientes y se lo importante que es el amor para ella y mas ahora.
Conozco a Dylan, se como la ama pero también se que si el enojo llega a cegarlo, eso no terminaría bien.
Justo ahora me encuentro en la sala de la casa de los Izarra junto a Dylan jugando a la play, quiero recuperar el tiempo con mi mejor amigo.
Quisiera contarle como me siento, decirle que me muero por ir al cuarto de su hermana y besarla, decirle que la amo y invitarla a una cena romántica de esas que no me gustan pero ella ama.
— Estoy preocupado… Alisson no se ve bien.
En cuando dice eso tiene toda mi atención y la verdad es que hace un par de semanas que no veo a Alisson . Creo que ambos emos estado envidando vernos, esto para que duela menos.
— ¿Por qué lo dices? - pregunto.
— No la veo muy animada, esta todo el día encerrada, usa polerones sumamente anchos de nuevo, ya no habla mucho conmigo y no esta comiendo mucho - dice y la verdad se le ve muy preocupado y a mi se me enciende una alerta.
— Es un proceso pero ella, de lo que e visto come poco y es parte de su recuperación.
— No se…
No podemos terminar de hablar cuando empezamos escuchar gritos en la cocina de la casa y nos paramos sumamente rápido a reconocer las voces de Alisson y el señor Dante.
Por favor que no haya recaído.
Por favor que no haya recaído.
Por favor que no haya recaído.
Gritos en la cocina y Alisson nunca son buena señal y menos con lo que su hermano me acaba de decir.
— ¡TE SUBES A LA BALANSA Y COMES! ¡ME OISTE! - grita el señor Dante.
— ¡JOTETE!, ¡NO ME VAS A OBLIGAR!
— ¿Crees que soy estúpido?. Pues no, se que no estas comiendo y que seguro lo que estas comiendo lo estas vomitando…