Cuando entramos al despacho del señor Emanuel llega a mis fosas nasales el olor de su perfume, un perfume muy varonil y imponente.

El esta sentado en su escritorio mientras lee unos papeles pero cuando ponemos un pie dentro de la habitación levanta su mirada, esa mirada seria que siempre lleva y que las únicas veces que lo e visto suavizar esa mirada es cuando esta con su hijo.

— Drew, Alisson ¿Qué hacen aquí - pregunta con su mirada fija en nuestras manos por lo que quiero solarme pero Drew no me deja, al contrario me sostiene aun mas fuerte - ?

— Queremos hablar contigo, padre - dice el pelinegro firme con la mirada fija en su papa.

Nunca pensé estar en esta situación, era como si ellos se hablaran con sus miradas y a la vez se mataran. Esto era incomodo.

— Debe de ser muy serio, siéntense - nos ofrece mientras con su mano nos señala los sillones que se encuentran a un lado de la habitación.

— Papa, primero que nada esto no lo puede saber el papa de Alisson - informo de forma serena.

— ¿La embarazaste? - chillo llevándose las manos a su cara -, joder, joder, ¿Com li diré al meu millor amic que el meu fill embaràs a la seva filla?

— ¡Papa! Alisson no esta embarazada - explica -, aun - cuando termina de decir eso puedo ver como su papa se le va el alma de su cuerpo y yo puedo sentir como el calor se sube a mi rostro.

Dios no puedo creer que haya dicho eso.

Que vergüenza.

— Queremos que nos ayude a que mis padres salgan del país hasta mi cumpleaños.

Esta bien, no fue la mejor manera de decirlo pero tenia que decirlo de alguna manera antes de volverme loca o que el señor Emanuel siga sacando conclusiones que no son.

— Suena loco pero te lo vamos a explicar - aclaro -, Alisson no esta bien y yo la voy a ayudar a recuperarse. Vamos a buscar especialistas para que la ayuden pero mientras este en casa con sus padres eso no va a ser posible, aparte ella no quiere que se enteren.

— Antes que pregunte, tengo un problema con los alimentos y la verdad es que quiero mejorar, no quiero morir y si Drew me esta dando la oportunidad de mejorar yo la quiero tomar pero si mi familia se entera yo no creo poder - explico y siento como por mis mejillas resbalan las lagrimas -, si ellos se enteran esto, todo esto que estamos haciendo seria por gusto, ellos me pueden destruir muy fácil y yo trato que no me destruyan pero no es sencillo y es algo que quiero mejorar.

El señor Emanuel acepto en ayudarnos con la única condición que el se mantuviera al tanto de todo,